Por Qué Los Ricos Usan Tarjeta De Crédito – Si Pueden Pagar De Contado
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A mí antes se me hacía rarísimo ver a una persona con mucha plata pagando con tarjeta de crédito. O sea, si pueden pagar de contado, ¿por qué se «endeudan»?
Pero resulta que más del 90% de los ricos tienen al menos una tarjeta de crédito, y más del 80% tienen dos o más activas. Aunque parezca contradictorio, prefieren usar tarjeta antes que efectivo, incluso si tienen el dinero disponible para hacer la compra.
Entonces, ¿por qué lo hacen? La respuesta corta: no se endeudan, se apalancan.
No es deuda, es estrategia
A diferencia de lo que muchos creen, los ricos no acumulan saldos en sus tarjetas, sino que pagan todo completo cada mes.
Ni siquiera lo hacen por los puntos (aunque eso también suma), sino por una razón más poderosa: utilizan las tarjetas como una herramienta de inversión invisible.
Imagina esto: tienen que hacer una compra, pero en lugar de sacar de una vez el dinero de su bolsillo, la cargan a la tarjeta. Así ganan hasta 45 días de gracia sin intereses, mientras dejan su plata quieta… o mejor aún, la ponen a producir durante ese tiempo.
Apalancamiento y beneficios por todos lados
Este movimiento les da ganancias temporales sin gastar un peso en intereses. Además, pueden usar herramientas como la compra de cartera para conseguir tasas más bajas, sin seguros ni estudios de crédito costosos.
Te doy un ejemplo personal: yo compré mi carro con tarjeta de crédito.
Una sola cuota, sin intereses, acumulando un montón de puntos, y logré conseguir la tasa más baja del mercado, sin hipotecar, sin pagar notaría, ni quedar atrapado con un crédito bancario tradicional. Solo usando la tarjeta estratégicamente.
Protección, seguridad y conveniencia
Y no todo es financiero. Las tarjetas ofrecen protección de compras y contra fraudes. Esto es vital cuando se manejan montos grandes. Si alguien te clona una tarjeta de débito, te quitan tu plata directamente. Pero si es con tarjeta de crédito, el banco asume el riesgo y tú estás cubierto.
A mí me han hecho fraudes un par de veces y me devolvieron todo. También he usado seguros de compra para recuperar pérdidas, robos o daños accidentales. Algunas tarjetas te cubren durante meses, sin que pagues nada extra.
¿Y sabes qué más? Con esos puntos acumulados cuando compré el carro, estuve yendo a mercar varios meses sin pagar ni un peso.
Experiencias VIP (sin pagar extra)
Hay otros beneficios interesantes: upgrades en hoteles, acceso a salas VIP en aeropuertos (yo ya no gasto nada allí porque tengo comidas, bebidas y comodidad mientras espero), y hasta seguros de viaje.
En Pisa, Italia, perdí una maleta y el seguro de la tarjeta me pagó más de 10 millones de pesos. Y todo esto sin papeleo complicado ni trámites engorrosos.
No te haces rico con puntos… pero sí con tiempo y control
Ojo: nadie se hace rico por acumular puntos. Pero las personas con dinero valoran la conveniencia, la exclusividad y sobre todo el ahorro de tiempo. Tener el control de cada gasto, ver los movimientos con fecha y hora exacta (algo que no puedes hacer con efectivo), es clave.
Esto es útil incluso para quienes tienen negocios o quieren llevar mejor su contabilidad.
A largo plazo, también es una jugada inteligente
Y además de todo esto, las tarjetas de crédito ayudan a mejorar tu historial financiero. Tal vez no necesites crédito hoy, pero cuando tengas un buen perfil, los bancos te ofrecerán préstamos grandes a tasas ridículamente bajas, que puedes usar para invertir y multiplicar tu riqueza.
Por eso los bancos le dan tarjetas fácilmente a los ricos. Porque aunque no necesitan el dinero, mueven mucho y eso le da ganancias al banco con cada compra, gracias a las comisiones que pagan los comercios.
Son clientes rentables y de bajo riesgo. Y una buena tarjeta de crédito suele ser el anzuelo para luego ofrecerles productos más sofisticados.
La clave está en saber usarla… y saber invertir
Al final, los ricos no se hacen ricos por gastar con tarjeta. Se hacen ricos porque saben invertir. Saben cómo funciona el dinero y lo usan a su favor.
Y la buena noticia es que hoy, invertir ya no es algo exclusivo para unos pocos. Puedes empezar desde cero, con poco capital, y aprender cómo funciona este mundo.